La última salida

Autor: Federico Axat Editorial: Ediciones Destino                                                                  Nº páginas: 544

"Ted McKay estaba a punto de pegarse un tiro en la sien cuando el timbre de su casa empezó a sonar con insistencia. Esperó. No podía apretar el gatillo con alguien afuera". 

Así comienza la novela, con el protagonista, un hombre rico, casado y con dos hijas a las que adora a punto de quitarse la vida, algo que no termina de hacer ante la insistencia del hombre que llama a su puerta una y otra vez. Un hombre que le dice que sabe lo que va a hacer, que le dice que no lo haga. Es entonces cuando descubre una nota en su escritorio: 

"Lo que vio lo dejó helado. Era su caligrafía. Sin embargo, no recordaba haber escrito ninguna de aquellas dos frases. 

ABRE LA PUERTA ES TU ÚLTIMA SALIDA".

Esto es todo lo que diré sobre la trama de este interesante relato. Si siempre es recomendable saber lo menos posible de determinadas lecturas, en esta novela es imprescindible llegar lo más ignorante posible para poder disfrutar de este maravilloso laberinto. Un laberinto en el que difícilmente encontrarás el camino de salida por ti mismo. Y en el que en más de una ocasión te preguntarás qué demonios está pasando, cuál es el truco y qué demonios se esconde tras la próxima página. 

Las sorpresas salpican una novela con un ritmo endiablado que el autor impone a base de desmontar teorías, de crear confusión, de manipular al lector y de plantear mil y un interrogantes, demostrando un magnífico dominio de la tensión narrativa y gran oficio a la hora de meter al lector dentro de la novela y hacerle vivir y sentir como lo hace el protagonista, con el mismo desconcierto y angustia que él siente. Toda la novela es un juego con el lector, al que constantemente va poniendo trampas (en el buen sentido de la palabra), intentando adelantarse a lo que va a pensar, para sorprenderlo una y otra vez. Cada vez que crees que ya sabes lo que ha pasado, un nuevo giro en la narración, te mostrará que te has equivocado.

"La última salida" es una novela que juega con el lector, lo marea, lo despista, lo confunde... quiere que entre en la mente de Ted McKay y que sea uno más de la historia. Ted es nuestro protagonista, toda la trama gira alrededor de él y la fuerza del relato recae sobre su persona pero no por ello es menos importante el papel de los secundarios que aparecen. Será Ted la pieza clave, pero los satélites que están a su alrededor también tienen una función destacada en la vida del protagonista. La evolución de todos los personajes a lo largo de la historia es constante, empezando primeramente por Ted, ya que el que conocemos no tiene nada que ver con su pasado y con su futuro, es una imagen borrosa en una espejo que los lectores tenemos que ir desenmascarando poco a poco porque ese aura de perfección no es lo que parece.

Con un lenguaje sencillo, directo y visual, un estilo casi cinematográfico y a través de un narrador omnisciente en tercera persona, el autor construye un thriller psicológico con una atmósfera inquietante cuidada al detalle. Un thriller con el que desafiar al lector más exigente y conseguir salir airoso de dicho desafío con una novela que atrapa de tal forma que conforme se avanza en la lectura se es consciente de que el propio lector tiene también una única y última salida: llegar al desenlace. Un desenlace brillante tras mil giros inesperados y mil teorías echadas por tierra. Un desenlace que te deja con la boca abierta. Y un epílogo que te deja sin respiración.